Nuestros vinos hablan de territorio, de la tradición, del alma de los vinos de la Manchuela
Una verdadera oda a la tierra y a las raíces más profundas de la Manchuela
En nuestras fincas hemos trabajado en recuperar la tradición de viñas y vinos multivarietales, obteniendo parcelas viejas de nuestras mejores castas: bobal, monastrell, garnacha, tinta, moravia agria
Recuperar la tradición como bandera
Lo fundamental del proyecto es apostar por las variedades tradicionales, algunas de ellas casi extintas, por la diferenciación de viñedos… por, en resumen, poner en valor la grandísima biodiversidad y recuperar la tradición vinícola de la Manchuela
En nuestras fincas hemos trabajado en recuperar la tradición de viñas y vinos multivarietales, obteniendo parcelas viejas de nuestras mejores castas: bobal, monastrell, garnacha, tinta, moravia agria
Recuperar la tradición como bandera
Lo fundamental del proyecto es apostar por las variedades tradicionales, algunas de ellas casi extintas, por la diferenciación de viñedos… por, en resumen, poner en valor la grandísima biodiversidad y recuperar la tradición vinícola de la Manchuela
Nuestra historia
se remonta a 1998
”Una nariz madura de cerezas, violetas y mermelada de fresas, avanza una complejidad que parece imposible para un vino en el que la barrica no juega un papel protagonista, demostrando que aquello fundamental no requiere de artificios.
Vinissimus
Nuestra historia se remonta a 1998
Tradición de viñas y vinos multivarietales
En 1998, el periodista Víctor de la Serna creó desde cero nuestra finca vitivinícola, en Ledaña (Cuenca), en el corazón de la Manchuela central; una comarca del Sureste español, casi olvidada hasta hace poco, que ofrece excelentes terruños
de dominante caliza a gran altitud.
Nos inspiró la fecunda coexistencia allí de esta casta de gran clase con las españolas garnacha y monastrell. También ampliamos nuestra diversidad varietal con una pequeña parcela experimental de touriga nacional.
Víctor
de la Serna
echó las raíces
de nuestro
viñedo
Tradición de viñas y vinos multivarietales
En 1998, el periodista Víctor de la Serna creó desde cero nuestra finca vitivinícola, en Ledaña (Cuenca), en el corazón de la Manchuela central; una comarca del Sureste español, casi olvidada hasta hace poco, que ofrece excelentes terruños
de dominante caliza a gran altitud.
Nos inspiró la fecunda coexistencia allí de esta casta de gran clase con las españolas garnacha y monastrell. También ampliamos nuestra diversidad varietal con una pequeña parcela experimental de touriga nacional.
”Una nariz madura de cerezas, violetas y mermelada de fresas, avanza una complejidad que parece imposible para un vino en el que la barrica no juega un papel protagonista, demostrando que aquello fundamental no requiere de artificios.
Vinissimus
Víctor de la Serna echó las raíces de nuestro viñedo
Tradición de viñas y vinos multivarietales
En 1998, el periodista Víctor de la Serna creó desde cero nuestra finca vitivinícola, en Ledaña (Cuenca), en el corazón de la Manchuela central; una comarca del Sureste español, casi olvidada hasta hace poco, que ofrece excelentes terruños
de dominante caliza a gran altitud.
Nos inspiró la fecunda coexistencia allí de esta casta de gran clase con las españolas garnacha y monastrell. También ampliamos nuestra diversidad varietal con una pequeña parcela experimental de touriga nacional.
Identidad de zona
Trabajar nuestras parcelas de forma minuciosa sabiendo que es ahí, en el campo, donde realmente se elaboran los grandes vinos.
Técnica y Tradición
Trabajamos de forma coherente en bodega, con los conocimientos técnicos que tenemos hoy en día pero de una forma tradicional.
Alma Vinícola
Obtenemos la expresión más pura de nuestras uvas, sin la tecnología que a día de hoy homogeneiza vinos y los deja sin alma.